domingo, 19 de octubre de 2014

18 de octubre de 2014

Querido diario, te cuento que terminé de ver, por milésima vez, Harry Potter y El Príncipe Mestizo. Tenía pensado ver las películas restantes de la saga pero decidí escribir esta entrada a éstas horas porque no quiero que se me vaya la inspiración. Te cuento que mi mente está un poco dispersa. Hoy pasaron muchas cosas que me es difícil asimilar tanta información.

Quisiera comenzar por contarte que el día de hoy estuvo magnífico. Pasé la mayor parte del día con mis amigos en un evento un poco extraño. Se trata de esos eventos parecidos al Comic-Con donde la gente se disfraza y se habla mucho de manga, animé y vídeo-juegos. A pesar de haber llegado tres horas tarde al encuentro, disfruté con todos y pasamos un rato ameno. Te cuento que compré varios artículos para mi colección personal de Puzzles y que tengo nuevos contactos con los que puedo compartir mi Hobby favorito.

Te cuento también que ésta entrada tiene un propósito, reflexionar sobre alguien y ese alguien es una amiga. La conozco desde hace un año y medio, creo; cuando conocí a mi grupo actual de amigos. Desde que la conocí, siempre ha generado algo en mí pero nunca he pensado, ni intentado, algo serio con ella por diversas circunstancias. Hoy, en la feria, alcanzamos a compartir un tiempo a solas porque el grupo con el que veníamos se nos perdió. Cuando nos dimos cuenta de que era imposible encontrar a los demás, nos pusimos a recorrer el poco de la feria que nos hacía falta ver. Al finalizar, ella sugirió irnos de aquel lugar y tomar un taxi para desplazarnos a nuestras respectivas casas.

Te cuento que decidí acompañarla hasta la casa. Originalmente, pensaba bajarme en mi casa, que queda a medio camino entre la feria y la casa de ella, pero decidí quedarme con ella porque le daba pánico quedarse sola en el taxi la otra mitad del trayecto. En el recorrido de vuelta, fue imposible no seguir pensando en ella.

Como te conté, desde siempre, ella ha generado algo en mí. No es como la chica de mis sueños, con 1.80m de altura y con cuerpazo de modelo; pero ¿sabes?, tiene unos ojos muy bonitos, es una genio y lo que es mejor, es real. Asimismo, tiene una forma de ser tan diferente a las demás mujeres que a veces es desconcertante. Muchos de mis amigos dicen que está loca pero, pues, no me importa mucho porque eso es lo que hace que ella sea única.

Quizá sea ésto, lo anterior, lo que me asusta, lo que me confunde. No es una simple muchacha a la que se le pueda llegar con una simple Pick Up Line sino que es alguien a quién hay que dedicarle mucho tiempo. No sé qué hacer. Y ¡agh! me iré a dormir. Lamento éste final tan malo, y la redacción, y todo, pero me duele la cabeza por la falta de sueño. Llevo 4 días durmiendo sólo 2 horas diarias y no puedo permitirme enfermarme de nuevo. Espero volver a escribirte pronto.

martes, 14 de octubre de 2014

14 de octubre de 2014

Querido diario, escribirte se me hace ya algo extraño. No es como al principio cuando te escribía todos los días. Te cuento que éstos últimos días han sido normales. Aunque han pasado muchas cosas, todo sigue su curso rutinario y no ha ocurrido algo que sea digno de recordar.

Te cuento que me siento resignado frente al tema académico. En todas mis materias voy mal, pésimo, y llevo ya cinco parciales sin presentar. También te cuento que me siento un poco triste por mis compañeros de grupo porque no es justo con ellos. Los trabajos que he presentado han tenido buena nota pero han sido mediocridad pura. También te comento que me encuentro un poco atrasado con mis trabajos. Recuerdo que debo hacer dos informes de laboratorio para mañana. Recuerdo que también debo montar un servidor FTP con Ubuntu Server mediante una máquina virtual para antes de la media noche. Y si no me falla la memoria, debo... No, no sé que más debo hacer. Estoy grave.

No sé que más escribirte. Quizá recuerdes mi problema de salud. Te cuento que en mi última visita a mi pueblo natal, me realicé un examen de sangre para ver como progresaba la enfermedad. Me siento feliz porque nuevamente estoy sano, los niveles de azúcar en la sangre ya están dentro del rango establecido. También te cuento que planeo volver mañana al gimnasio. Desde el semestre pasado, cada noche antes de dormir, he estado haciendo varias series de flexiones de pecho y de abdominales. Los resultados no se observan directamente pero sí se sienten. Quizá si continúo así, en unos cuatro o cinco meses ya tenga los músculos con forma definida.

Siento mucho no escribirte más. A lo largo de día pienso en muchas cosas que podría consignar acá pero que, lamentablemente, se me olvidan cuando las estoy escribiendo. También hay muchas otras cosas que quisiera escribir pero no encuentro el espacio para ello. Para ser sincero, ésta entrada me parece extraña. Me da la impresión de que hay muchos conectores y palabras repetidas, al igual que hay muchas muletillas. Me despido, y como siempre, dejaré ésto hasta acá y me retiraré lentamente.